Por: Carlos Rafael González Ariza
Muchos buscan y encuentran la belleza de las cosas, en los colores; otros, en las formas, en la melodía de un canto, en aquello que agrada al oído o a los ojos.
Talvez mi infancia sin juegos, sin vestidos nuevos, me obligó a encontrar en lo que tenía, gente buena a mí alrededor, la esencia de lo realmente importante, verdaderamente bello y una buena razón para estar alegre.
Muy cerca de mí, estaba mi madre, con una gracia para mostrarme mis penas en forma de chistes y unos hermanos listos para reírse de lo que no teníamos, Unos vecinos que visitábamos sin avisar y nos atendían con el mismo entusiasmo con que se esperan a los invitados y Unos amigos que nos apreciaban a pesar de que nada teníamos.
Talvez haber superado ese estado de pobreza extrema, me convenció que no hay nada que pueda comprarse, con las emociones gratas que nos causan las personas que nos aman y las que nos entregan su amistad en cada encuentro y nos hacen sentir la emoción de querer y ser querido.
Feliz día del amor y la amistad y que Dios
bendiga por siempre a la gente que quiero y me quieren.
Carlos Rafael González Ariza
El hijo de Rafaela la de Gume
Ese soy yo